Fallece Tony Isbert, actor de cine y teatro, a los 74 años en Santander

El mundo del cine y el teatro españoles llora la pérdida de Antonio José Spitzer Ysbert, conocido artísticamente como Tony Isbert, quien ha fallecido a los 74 años. El actor fue encontrado sin vida en su domicilio de Santander, ciudad en la que residía en los últimos años.

Según fuentes cercanas, Isbert había sido ingresado recientemente a causa de una enfermedad respiratoria. Tras recibir el alta médica, su estado de salud parecía estable, pero finalmente fue hallado sin vida en su hogar.

Nacido en Madrid en diciembre de 1950, Tony Isbert pertenecía a una de las sagas más emblemáticas del panorama artístico español. Era nieto del legendario actor Pepe Isbert e hijo de la reconocida actriz María Isbert, lo que lo convirtió desde joven en heredero de una tradición actoral de gran prestigio.

Su carrera cinematográfica comenzó en 1969 con la película «¿Es usted mi padre?», dando así sus primeros pasos en la gran pantalla. Ese mismo año compartió protagonismo con Marisol en la cinta «Carola de día, Carola de noche», donde interpretó el papel de Daniel Rey.

Pero más allá del cine, Tony Isbert mantuvo una estrecha relación con el teatro, disciplina en la que consolidó una trayectoria respetada. Fue un habitual en los premios otorgados por la Asociación de Amigos de los Teatros Históricos de España (AMIThE), que en 2009 le concedió su máxima distinción: la Medalla de Oro, en reconocimiento a su extensa carrera y su compromiso con las artes escénicas. Su presencia se esperaba en la próxima entrega de estos galardones, prevista para el 4 de abril.

La noticia de su fallecimiento ha generado una gran conmoción en la comunidad artística, que lamenta profundamente su pérdida. Su carisma, su talento y su amor por el teatro y el cine han dejado una huella imborrable en la cultura española.

Con su partida, se cierra un capítulo en la historia del espectáculo en España, pero su legado permanecerá vivo en las pantallas y los escenarios, donde Tony Isbert brilló con luz propia.