Cómo actuar ante una riada al volante: guía práctica y consejos de supervivencia

La reciente DANA que ha afectado a varias provincias del levante español, especialmente a Valencia y Albacete, ha dejado un rastro de graves daños materiales y, lamentablemente, un número significativo de víctimas mortales y desaparecidos.

01.11.2024 Este tipo de fenómenos climáticos extremos han motivado a la Policía y a la Dirección General de Tráfico (DGT) a recordar las medidas de seguridad fundamentales que todos los conductores deben tener en cuenta en caso de verse sorprendidos por una riada mientras conducen.

Recomendaciones clave si te encuentras en una riada con tu coche

En una situación de inundación, es fundamental evitar cruzar corrientes de agua, ya que el riesgo de ser arrastrado es elevado. La capacidad del agua para mover un vehículo depende de varios factores:

1. Peso del vehículo.
2. Velocidad de la corriente.
3. Altura de los bajos del coche.
4. Profundidad del cauce.
5. Inclinación del terreno.

Es esencial mantener la calma y no subestimar el poder de una corriente de agua. Incluso en vehículos pesados y avanzados tecnológicamente, el agua puede socavar el fondo y hacer que el coche pierda tracción y control. A continuación, detallamos algunas recomendaciones específicas para enfrentar esta situación.

Consejos para conducir en situaciones de inundación o riada

1. La fuerza de agarre, tu mejor aliada: En áreas con hasta 30 centímetros de agua y sin una corriente fuerte, muchos vehículos pueden seguir avanzando gracias a la fuerza de agarre. Esta fuerza depende del índice de adherencia y el peso del coche; siempre que la fuerza de agarre supere la de la corriente, el vehículo puede moverse sin mayor dificultad, aunque existe riesgo de aquaplaning.
2. Evita que el coche flote: A partir de una profundidad de 45 centímetros, la mayoría de los coches empiezan a perder contacto con el suelo debido al empuje vertical del agua. Si las ruedas pierden tracción, la corriente tomará el control de la dirección del vehículo. En este punto, lo más seguro es abandonar el coche, salir rápidamente por la ventanilla y dirigirse a un lugar seguro.
3. Precaución con los todoterrenos: Aunque estos vehículos están mejor preparados para condiciones adversas gracias a su mayor altura, peso y tracción, también tienen un límite. Según la DGT, con 75 centímetros de agua, el empuje vertical puede hacer flotar incluso a un todoterreno. En este caso, la recomendación es la misma: salir del vehículo lo antes posible y buscar refugio.

La vida es irremplazable, el coche no

Ante una riada, lo más importante es recordar que los daños materiales siempre pueden repararse, pero la vida no. Actuar con prudencia, seguir estas recomendaciones y no sobrevalorar las capacidades de un vehículo pueden ser claves para superar situaciones de emergencia en carretera.