Implantes y el deporte

Implantes y deporte. Parecen dos temas que no tienen nada en común, pero es importante hablar de su relación. Muchas veces pensamos que las piezas implantadas reemplazan dientes que se cayeron con el tiempo y la vejez, pero lo que no se suele pensar es que las personas pierden dientes por más motivos.

El tema que nos concierne es el deporte, ya que practicándolo hay malas caídas o golpes en la boca que pueden dar lugar a la falta de algún diente. Esto no debería de hacer que la gente deje de practicar deporte, ya que hoy en día la ciencia de la implantología dental está muy avanzada.

Sin embargo, y si tuviste la mala suerte de estar en esta situación, te dejamos estas pautas a seguir para recuperarte lo antes posible de la intervención y puedas volver a practicar tu deporte favorito lo antes posible.

¿Incompatible?

El deporte y los implantes no son incompatibles, aunque hay que tener en cuenta que, como toda intervención, el paciente necesita un tiempo de reposo. Por suerte, este no suele durar más de 24 o 48 horas.

Sin embargo, el paciente deberá limitar la actividad física hasta dos semanas después de la intervención.

Después del reposo

El periodo de osteointegración es clave para que el tratamiento funcione. El hueso que rodea el implante se está remodelando y formando. Por ello, es muy importante no ejercer fuerza sobre él para no interferir en este proceso.

Los deportes de contacto son los más “peligrosos” a la hora de cuidar un implante ya que se reciben golpes y se dan más caídas que en otros deportes. En este caso se recomienda utilizar alguna férula para proteger la dentadura.

En el caso de practicar natación o submarinismo, se recomienda no practicarlo hasta que la herida de la intervención esté completamente sellada, es decir, hasta que la encía esté cicatrizada. Aproximadamente esto ocurre a 10-14 días de la intervención, dependiendo del tipo de procedimiento.