Cantabria incrementará el gasto educativo hasta alcanzar el 5% del PIB regional para convertir la educación en un servicio esencial
Santander – 27.09.2023
El Gobierno de Cantabria trabajará para que la educación sea considerada un servicio público de primer nivel y, por lo tanto, el gasto público en educación sea un gasto esencial. Para ello, a lo largo de esta legislatura, se incrementará la inversión pública en educación hasta alcanzar el 5% del PIB regional, en consonancia con lo establecido en el acuerdo por la educación de Cantabria de 2017 y el compromiso de mejora del gasto público en educación, que establece la legislación educativa.
Así lo ha anunciado el consejero de Educación, Formación Profesional y Universidades, Sergio Silva, durante su primera comparecencia en el Parlamento de Cantabria para exponer las líneas programáticas y proyectos que van a definir la política y estrategia educativa del Gobierno de Cantabria a lo largo de estos cuatro años.
En este sentido, Silva ha subrayado su» apuesta irrenunciable» por un sistema educativo «de mayor calidad», que dé al alumnado la respuesta educativa que necesita en cada momento, y que «contribuya a reforzar la labor del docente» permitiendo dedicar los esfuerzos de los profesionales educativos a enseñar.
Se trata, ha explicado, de un modelo «inclusivo» que priorice «equidad, innovación y creatividad» y en el que la calidad no se entienda como un mero ranking, sino como «un conjunto de valores que sirven para enriquecer nuestro sistema educativo permitiendo el avance y el desarrollo personal, curricular y competencial del alumnado».
Por ello «hemos de mejorar en la gestión no solo de las infraestructuras educativas y los servicios complementarios sino del personal docente y no docente, haciendo más ágil la puesta a disposición de recursos humanos en los centros educativos».
Compromisos para incrementar la inclusión y la equidad
Para lograr estos objetivos, Educación pondrá en marcha un Plan Director de Inclusión para Cantabria (PDI) que proporcione el recurso concreto al centro donde surja la necesidad, de modo eficaz y sostenible, buscando especialización en el diagnóstico y rapidez en la respuesta educativa. Además, destinará 3 millones de euros a la universalización real de banco de recursos educativos gratuitos en la enseñanza básica, y su progresiva extensión en Bachillerato y Formación Profesional (FP) de grado básico, implicando a más ayuntamientos en la iniciativa.
También se potenciarán los orientadores y especialistas de atención a la diversidad en los centros ordinarios para atender al alumnado con necesidades de apoyo educativo.
De hecho, tal y como ha confirmado el consejero, en este curso 2023-2024, ya se han tomado medidas que ponen de manifiesto este compromiso con la atención a la diversidad como el incremento de 12,5 orientadores en los centros y equipos; 25 maestros más de pedagogía terapéutica y audición y lenguaje; y la no continuidad del concierto de la orientación en su segunda fase, reservando la evaluación diagnóstica a la red de profesionales del sistema público para no comprometer recursos públicos, junto a medidas necesarias para no perjudicar a los centros concertados que no hayan participado en la primera fase de este modelo de concierto de la orientación.
Asimismo, se potenciarán e incrementarán, cuando sea necesario, las unidades de educación especial en centros ordinarios; se fortalecerán los equipos para conseguir un banco de recursos de apoyo a la escuela, y se reforzará el modelo de atención domiciliaria y hospitalaria. También, ha aclarado Silva, los programas de refuerzo educativo se gestionarán con criterios objetivos y convocatorias abiertas para que lleguen al mayor número de centros.
Buena convivencia e inclusión
Entre otras medidas, la Consejería de Educación, en colaboración con los ayuntamientos, implantará programas innovadores en materia de promoción de una buena convivencia y de acogida, adaptados a cada zona, y creará una mesa para la Inclusión y Orientación Educativa, en la que estarán representadas familias y docentes, a modo de foro específico de encuentro en la materia, «porque escuchar es imprescindible».
Silva también ha anunciado que Educación implementará medidas de reducción del abandono escolar temprano, que contribuyan a «recuperar» alumnos que han abandonado el sistema educativo para su mejor inserción socio laboral. En este ámbito, se otorgará mayor protagonismo a la FP de grado básico y medio para que, desde 2º de ESO, el alumnado cuyos intereses vayan en consonancia con un itinerario profesionalizador accedan a la FP de grado básico con la que obtendrán el título de secundaria obligatoria y favorecer así su avance en el recorrido educativo.
En el mismo sentido, la Consejería mejorará el programa de detección y apoyo a las altas capacidades y priorizará la formación del profesorado en metodologías y prácticas inclusivas y en educación para la igualdad y buena convivencia.
El consejero de Educación se ha comprometido con la apertura de los centros a la comunidad, sobre todo en periodos no lectivos, para atender al alumnado con mayores dificultades de atención. Además, en colaboración con los ayuntamientos y otros colectivos, trabajará, en el marco del programa municipios educativos, en varias líneas como absentismo, hábitos de vida saludable, apertura de centros al entorno o escuela de familias, entre otros.
Puntos de mejora
Cantabria, partiendo de los objetivos 2030 de la Estrategia Europea en educación, elaborará un plan director que, desde criterios técnicos, diagnostique los principales puntos de mejora de nuestro sistema educativo.
Entretanto, Cantabria incrementará hasta 50 las aulas de 1 año para garantizar la escolarización universal y reforzar así la escolarización temprana, especialmente en el tramo de 0 a 3 años, debido, sobre todo, a la importancia de la etapa infantil para el desarrollo futuro de los niños y a su carácter educativo y no sólo asistencial, compensando desigualdades.
Además, «en aras de garantizar el acceso del alumnado a la educación en igualdad de condiciones», Educación invertirá 7 millones de euros para avanzar en la reducción continua de la ratio de alumnos por aula, especialmente en educación primaria, absorbiendo así bajada de la natalidad y evitando el cierre de unidades y de centros, sobre todo en el ámbito rural.
Respecto al profesorado, la Consejería de Educación, Formación Profesional y Universidades apostará por la estabilidad docente, con la continuidad pedagógica de los docentes y la reducción de la interinidad con ofertas de empleo público docente adecuadas.
En este sentido, Silva se ha comprometido a la correcta ejecución de los procesos de estabilización y reposición de docentes, especialmente en 2023 y 2024, reduciendo así la tasa de interinidad del profesorado hasta el 10%, y aumentar las plantillas orgánicas de los centros educativos.
Por último, el consejero ha apostado por el refuerzo y nuevo impulso a los programas de movilidad internacional, tanto de alumnos como de docentes, y la mejora de la competencia didáctica y técnica del profesorado, así como de la competencia digital con una correcta planificación de la Acreditación Digital Docente como medida de mejora de la competencia digital del alumnado.
Formación Profesional y Universidad
En el ámbito de la FP, el nuevo modelo imperante, que va a necesitar de la participación de un mayor número de empresas y del cambio de estructuras y formas de trabajo, será la base para trabajar en paralelo el IV plan regional de la Formación Profesional 2024-2027 que, tal y como ha señalado el consejero, permita, «quizás con rango de ley», abordar una planificación adecuada del modelo de Formación Profesional para nuestra región.
Se trata de definir un mapa de FP con «sentido para los sectores productivos» y centrado en sectores palanca de la economía de Cantabria, como pueden ser «la industria 4.0, el sector agroalimentario-medioambiente-turismo-salud y atención a la dependencia», que permitan –ha insistido Silva- un desarrollo de la mejor política activa de empleo qué es la Formación Profesional.
También se ha referido el consejero a la importancia del aprendizaje a lo largo de la vida, puesto que ya no se concibe la educación como algo temporal, haciendo especial hincapié en la formación para adultos, la alfabetización digital o el desarrollo de las competencias lingüísticas en otros idiomas, que deben ocupar un lugar primordial.
En el ámbito de la Universidad, otra de las prioridades de la Consejería en esta legislatura, se abordará un marco jurídico derivado de la nueva ordenación del sistema universitario, al tiempo que se afrontará un contrato programa plurianual para que la Universidad de Cantabria «gane en estabilidad».
A este «gran reto» hay que sumar el desarrollo de la ley de la ciencia de Cantabria, que implica, según Silva, la puesta en marcha de una estructura de innovación investigación y transferencia del conocimiento, en distintos niveles de desarrollo, además de un compromiso vinculante de financiación de gasto público qué es necesario ir asumiendo progresivamente conforme a la propia norma.
Principales retos y desafíos de la educación en Cantabria
En este sentido, Silva ha apuntado que, además del reto de la equidad, el sistema educativo cántabro se enfrenta a otros desafíos como la pérdida de alumnos en los tramos de entrada por la baja natalidad; la salud mental y la convivencia en el ámbito escolar; la pérdida de autoridad del docente y el consiguiente riesgo de desmotivación entre el profesorado; así como el reto legislativo y de cambio de modelo educativo.
Además, su departamento hará frente a la necesidad de desburocratización de la tarea docente y la mejora del esfuerzo inversor en materia educativa. En definitiva, ha dicho el titular de Educación, «la búsqueda de calidad», puesto que «Cantabria debe aspirar a mejorar y conseguir mejores indicadores de calidad, que redunden en beneficio del alumnado».
Para superar todos estos retos, Sergio Silva ha apelado al «espíritu de servicio esencial de la educación» y ha tendido la mano a los presentes para conseguir consenso con la equidad, calidad y esfuerzo compartido, implicando en la educación a centros docentes, familias e instituciones.
Además, ha apostado por con establecer un consenso con los objetivos de la estrategia europea para la educación 2030 y el diálogo y la estabilidad del sistema educativo, retomando el espíritu del acuerdo por la educación en Cantabria de 2017. «Las mejores decisiones que tomemos serán las decisiones que tomemos en común y aquellas que den estabilidad al sistema. La educación exige tiempo, consenso y todo lo que no vaya en esta dirección perjudica a la educación en general y a la educación de Cantabria en particular», ha rubricado el consejero.
Fuente: www.cantabria.es